Abandono

Lincoln apareció un día en el arcén de una carretera, atropellado, malherido y hambriento.

Su caso es y será, por desgracia, uno de mas de los que se dan en nuestro país cada día. Dicen las protectoras de animales y las asociaciones que España es el país de Europa con mayor índice de abandonos. Triste record el nuestro. También dicen que no es en verano cuando se producen los mayores picos de abandonos sino que realmente se producen durante todo el año, existen condiciones que pasan factura: fin de la temporada de caza, vacaciones , regalos navideños que han crecido y ya no se pueden tener en casa, animales que de repente molestan, aquellos que han nacido y no se pueden mantener tantas crías, la familia que se separa o que se muda ... existen muchos motivos para abandonarlos.

Pero, pensemos, ¿qué le ocurre a un perro o gato que se ha criado en una casa y de repente le han abandonado?, ¿Cuál es su reacción?. La mayoría mueren atropellados y el que se salva de este cruel destino tiene que vagar por calles de nuestras ciudades o pueblos. Buscarse la vida entre basuras o esperar a que alguien caritativo le de algo. Tal vez sea peor para aquellos que llegan a perreras o para aquellos que por desgracia caen en manos violentas.

El animal se encontrará desorientado, tendrá frío, calor, hambre y verá que la mano que le alimentaba es ahora la que le maltrata. Su mundo de repente ha cambiado, el entorno se ha vuelto hostil y el hambre le acecha, ahora tiene que buscarse su propio alimento porque ya no hay nadie que le llene el cuenco. Tal vez sea nuestra culpa por haberlos domesticado pero es nuestra herencia y debemos de mantenerla.

Aunque no se sea un gran amante de los animales solo hay que mirarles a los ojos para darse cuenta de su indefensión en nuestro mundo.